Aceite de Camelia
El aceite de camelia empezó a consumirse en China en torno al año 600 antes de Cristo con fines culinarios, cosméticos y medicinales. La cantidad de ácidos grasos saturados de este aceite está muy por debajo de los niveles que presentan los aceites de girasol y de oliva.
El aceite de camelia también posee vitaminas, minerales y ayuda a restablecer el equilibrio de la piel, por lo que se está desarrollando su aplicación en la industria cosmética. Es utilizado en la piel por su gran poder de absorción, incluso mucho más que el aceite de Argán. Es de textura muy ligera. Contiene un alto porcentaje de vitamina E y ácidos oleicos, como el omega 9, pero en general, contiene más acidos grasos que el aceite de oliva. La vitamina E es un estupendo antioxidante y se considera primordial para la protección celular y una piel saludable. Pincha aquí para leer otro artículo sobre el Aceite de Camelia.
PROPIEDADES DEL ACEITE DE CAMELIA
Debido a su alta concentración en ácidos grasos ayuda a reestablecer la elasticidad, el equilibio y la suavidad de la piel razón por la que haya sido utilizado además, para el cuidado del cabello.
Utilización en el tratamiendo de Pieles sensibles e irritadas. Ideal para Pieles Grasas y Acneicas pues este aceite regula la secreción sebácea, desbloqueando poros e hidratando la piel previniendo la formación de granos
Restaura el PH de las Pieles Secas
Suaviza las arrugas e incipientes marcas de la edad
Cicatrizante
Contiene Vitamina E
Estimula el crecimiento del Cabello
Ideal para después del afeitado
Idóneo para casos de dermatitis y Psoriasis
